Desde que el momento que Dios creo al hombre, en ese mismo momento se creo un enemigo acerrimo para el hombre -satanás- que siempre ha soñado con la destrucción de esta hermosa creación de Dios como es el ser humano, lucho denodadamente hasta lograr que el hombre fuera desechado de la presencia de Dios, cuando esto sucedió este enemigo creo tremendas ataduras sobre el hombre, su espíritu fue encadenado y privado de la presencia de Dios, dándole información de los placeres a su carne hasta acostumbrarlo a echar mano de esos placeres para evitar que Dios tuviera acceso a su vida; todo esto lo fue logrando poco a poco, hasta que Dios en su infinita misericordia extendió una vez mas su gracia para con el hombre, abriendo una gran y larga oportunidad para que el hombre pudiéra tornarse a El. La lucha ha sido titánica, Dios esta esperando que el ser humano busque su ayuda, que se acerque a El para recibir sus bendiciones; el hombre sabe muy bien que Dios le ama; pero satanás lucha por deformar la existencia de Dios en la conciencia del hombre y le dice que Todo es Dios, que no debe de aburrirse en la práctica de una religión, es mas, le permite que practíque una religión; pero una religión extrema ya sea tolerante o violenta, esa es la esencia de la religión, ahora bien, si no quiere involucrarse en una religión, entonces puede darse la dolche vita, tomando, fumando, drogándose, practicando el sexo desenfrenado, que no tiene nada de malo. Jesús dijo: "velad y orad por que el espíritu está presto pero; la carne esta enferma" ¿que tan prestos estamos para darle lugar al espíritu? Es tiempo de dejar la autojustificación y tornarnos a Dios con todo nuestro ser para ser verdaderos vasos ungidos por el Espíritu Santo.
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